
16 Ene Blog: Lo que no sabías sobre los divorcios
Pese a que aún existen múltiples causales de divorcio, ruptura irreparable y consentimiento mutuo son actualmente las más utilizadas, toda vez que evitan que las personas tengan que expresar las razones específicas e íntimas por las que quieren terminar su relación matrimonial.
En el caso de divorcio por consentimiento mutuo ambas partes deben haber tomado la decisión voluntaria de terminar su relación matrimonial y tienen que acordar todo lo relacionado a los bienes adquiridos y/o hijos habidos durante el matrimonio. Luego de discutir cada detalle de la división de los bienes adquiridos durante el matrimonio y de la custodia, patria potestad y alimentos del(los) hijo(s), las partes deberán presentar una petición al Tribunal en la que esbocen todos estos acuerdos. El Tribunal señalará una vista en la que discutirá el contenido de dicha petición, se cerciorará que ambas partes están de acuerdo con el divorcio y, luego de los trámites correspondientes, decretará disuelto el vínculo matrimonial.
Por otro lado, la causal de ruptura irreparable se utiliza cuándo las partes no han podido llegar a acuerdos o cuando una de las personas no está de acuerdo con la decisión de divorciarse. Un procedimiento bajo esta causal es uno contencioso, lo que significa que se tiene que demandar al otro cónyuge para poder solicitarle al Tribunal que disuelva el vínculo matrimonial. Por último, en un divorcio bajo ruptura irreparable no se dividen los bienes adquiridos durante el matrimonio. Este debe ser radicado en un pleito aparte por lo que esta causal resulta más costosa que un divorcio por consentimiento mutuo.